Te he visto pasar junto a mi lado pero no ha sido de manera indiferente pues, en ese preciso instante, despertaron emociones largo tiempo dormidas dentro de mí. Ciertos recuerdos se revolvieron en mis entrañas al igual que fantasmas de aquellas cosas que alguna vez sentí. Bien sabes que fuiste mi locura y mi desesperación, y también sabes que estuve locamente enamorado de ti, pero eso ya forma parte del pasado, ya es historia, como retales de memoria son momentos que una vez sufrí. No te guardo rencor por tu ausencia porque, para llegar a sentirla, tendrías que haber sido mía alguna vez, pero tú y yo sabemos que eso nunca llegó a ocurrir. Heriste este pobre corazón en aquella noche con un puñal asesino de frío olvido, agonizando en el suelo, desangrándose hasta morir. Te he visto pasar junto a mi lado y pude observar que mostrabas pena y tristeza en tu faz. No es alegría lo que me provoca pero, ten por seguro, compasión no voy a sentir. Lo que tienes es la recompensa por tu trato, las consecuencias de todos tus actos, y tendrás que soportar tu pesada carga como yo una vez lo tuve que hacer por ti.