A ver, me hacen despertarme a las 10 para estar a las 11 en la Escuela para recoger las fotos y ver la música ambiental para la graduación. Al final no hay fotos ni tampoco hay ordenador portátil para la música. ¿No me podían haber dejado dormir tranquilo, que me cortaron el pedazo de sueño que tenía?
Por suerte aproveché la mañana para comprar unos regalos, aunque me decepcionó no poder encontrar uno que estaba buscando. Pues nada, esta tarde te daré el más insignificante y cuando tenga el otro te lo daré, aunque tenga que bajar al sur. Si es que…