Acaparas mis sentidos
Perfumas mi ser con tu dulce olor provocándome
Aún quema sobre mi piel tu lengua juguetona retándome
Cada vez que cierro los ojos ahí está tu cara sonriente
Saboreo mi mordisco prohibido en tu carne con deleite
No existe silencio para mí sin tu voz hablándome
No sé bien cómo sucedió, pero estás enamorándome