Primero pensaba aclarar ciertas cosas, como por ejemplo por qué escribo, pero se me quitaron las ganas. Luego iba a hablar sobre el partido de esta tarde y el vaho que desprendía por la nariz, pero también se me fueron las ganas. Mientras escribo este post también se me están yendo las ganas, pero no, tengo que terminarlo y publicarlo. Podría echarle la culpa al resfriado, pero también hay más cosas… ¡Coñe, quiero ponerme bien!
El mundo callado
Es curioso cómo el constipado este que tengo me ha ido tirando desde la garganta a los oídos. Ahora mismo, y desde hace unas horas, sufro una disminución de la agudeza auditiva algo notable. Todo está tranquilo a mi alrededor, todo está callado, estoy en un mundo feliz de sonidos apantallados. Los coches ya no hacen tanto ruido, los niños no lanzan gritos tan molestos… Es en estos momentos cuando escucho mi propia respiración, los latidos del corazón y más abajo aún, mis pensamientos arrastrándose. Total, para lo que hay que escuchar…
Malo como un chucho
Joder, esto de trabajar en Ifara me tiene fatal. Afonía intermitente, tos sin expectoración, mucosidad abundante… Y lo mejor de todo es que hasta que pase el período de prueba no puedo cogerme una baja porque si no me echan del trabajo. Tampoco tenía pensado cogerla si mañana continúo igual, pero si empeoro no sé qué haré…
Compex
Compex es una empresa que se dedica a fabricar electroestimuladores para deportistas y/o profesionales de la salud. Aparte queda el tema del intrusismo profesional con las personas que se dedican a la belleza, que muchas veces usan terapias propias y exclusivas de los fisioterapeutas, nada más [y nada menos] que por la diferencia de preparación y conocimientos.
Enraf-Nonius es otra empresa que se dedica al tema de los fisioterapeutas, pero creo que en cuestión de electroestimuladores Compex va mucho más por delante que ellos. Mirando por Internet me he dado cuenta de que los venden como aparatos de musculación, y es que sirven como complemento al ejercicio, no como sustituyentes. Si tuviese dinero de sobra me compraría uno, porque hay muchas técnicas que se pueden solapar con la electroestimulación, como masajes, estiramientos y demás. El modelo que está en la foto sale 800 y pico euros, casi nada, pero sabes que te va a durar siempre y que es una marca de confianza.
Señores de Compex, si quieren me pueden regalar un aparatito de estos, y prometo darle un buen uso y contar a todo el mundo las maravillas de su tecnología :rolleyes_tb:
La mentira de Mary Poppins
Tod@s nos acordamos de la película de Disney en la que Dick Van Dyke interpretaba a Bert, un deshollinador-cantante-bailarín bastante simpático. Sin embargo, en la época en la que está ambientada la película la realidad era otra muy distinta. Pocos deshollinadores pasaban de la mayoría de edad, y mucho menos tenían la edad de Bert, sino que eran menores de edad, niños capaces de meterse por los recovecos de las chimeneas. Si quieres saber más, puedes leer uno de los capítulos del libro de Sherwin B. Nuland «Cómo morimos», uno que se titula «La malevolencia del cáncer», muy interesante. Tengo ganas de ojear el libro a ver si el resto es igual para comprármelo.
Secreto
Sé una cosa del `text(C)_2text(H)_5text(Cl)` pero es un secreto profesional…