Nueva canción de Iván Ferreiro, se ve que el hombre siente algo de rencor…
Las flores que nos regalaron se cuidaban solas o se estropearon
depende de quien nos trajera nuestro regalo a casa
la gente nos sonreía o disimulaba sin ninguna gracia
y los brazos se nos juntaron para hacer algo mas grande que el universo
ahora las cosas no van tan bien
podríamos decir que todo duele
casi todas las personas buenas que me rodeaban
eran la peor basura que puedas tirar
cerdos ignorantes sois unos hijos de puta
lo siento no puedo evitarlo
de verdad que no puedo evitarlo
algunos me aconsejaban que me rindiera o que me callara
yo era el dedo en el culo de todo aquel que me cruzaba
los días iban pasando y todavía tu me negabas
y otros llenos de mierda no me miraban ni a la cara
pero ahora para ellos ya no está tan bien
también podríamos decir que es una pena
casi todas las personas buenas que me rodeaban
fueran la peor basura que puedas tirar
cerdos ignorantes sois unos hijos de puta
lo siento no puedo evitarlo
de verdad que no puedo evitarlo
cerdos ignorantes sois unos hijos de puta
lo siento no puedo evitarlo
es verdad que no puedo evitarlo
si alguno que escuche esto le sentó mal o le quemaba
que sepa que yo no opino que solo cuento lo que pasaba
si no puede aguantarlo que piense un poco que esto se aclara
que si no te gustó esta letra tenemos guerra declarada.
Lo siento, pero es que cuando la escucho me sale el sentimiento guanche-chovinista-nacionalista-independentista por las orejas. Qué cosas.
Llamarme guanche,
hijo de los volcanes y las lavas,
llevar la frente alta,
tener el corazón hecho de libertades.
Llamarme guanche, nada más,
mi patria, un negro malpaís,
mi flor, una retama.
Beber el agua de una fuente,
descansar bajo un pino,
tener la mar que me separa
de todo aquello que no quiero
y que me ata.
Llamarme guanche,
labrar puntas de lanza,
darle vueltas al barro
y que el gánigo nazca.
¡Llamarme guanche!
¡Llamarme guanche!
Caminar sin caminos,
subir a la montaña,
mirar entre las nubes San Borondón lejana;
tallar con la tabona
en una añepa larga
y en cada beñesmén
recolectar la tierra.
Yrinchen yayo taro
beber ahof de hara.
Dar gracias, Achamán,
labrar una obsidiana
para mirar mi rostro
de hombre libre,
cuando nace Magec
cada mañana.
La primera vez que escuché a Carmen París fue gracias a esta versión del clásico de Joaquín Sabina, hace ya bastante tiempo. Pues hoy ha sido la primera vez que he visto una fotografía suya y he de decir que no encajaba con la imagen especulativa que tenía en mi mente. Se la ve bastante alternativa, hasta es posible que me la haya podido cruzar alguna vez por fuera del Haring, del Blues Bar o del O’Clock y yo sin darme cuenta.
Como quien viaja a lomos de una yegua sombría,
por la ciudad camino, no preguntéis adónde.
Busco acaso un encuentro que me ilumine el día,
y no hallo más que puertas que niegan lo que esconden.
Las chimeneas vierten su vómito de humo
a un cielo cada vez más lejano y más alto.
Por las paredes ocres se desparrama el zumo
de una fruta de sangre crecida en el asfalto.
Ya el campo estará verde, debe ser Primavera,
cruza por mi mirada un tren interminable,
el barrio donde habito no es ninguna pradera
desolado paisaje de antenas y de cables.
Vivo en el número siete, calle Melancolía.
Quiero mudarme hace años al barrio de la alegría.
Pero siempre que lo intento ha salido ya el tranvía
y en la escalera me siento a silbar mi melodía.
Como quien viaja a bordo de un barco enloquecido,
que viene de la noche y va a ninguna parte,
así mis pies descienden la cuesta del olvido,
fatigados de tanto andar sin encontrarte.
Luego, de vuelta a casa, enciendo un cigarrillo,
ordeno mis papeles, resuelvo un crucigrama;
me enfado con las sombras que pueblan los pasillos
y me abrazo a la ausencia que dejas en mi cama.
Trepo por tu recuerdo como una enredadera
que no encuentra ventanas donde agarrarse, soy
esa absurda epidemia que sufren las aceras,
si quieres encontrarme, ya sabes dónde estoy.
Vivo en el número siete, calle Melancolía.
Quiero mudarme hace años al barrio de la alegría.
Pero siempre que lo intento ha salido ya el tranvía
y en la escalera me siento a silbar mi melodía.
Joer, todavía me acuerdo de ver este vídeo en la televisión de mi abuela antes de almorzar, cuando daban los 40 Principales en Canal+.
Lay beside me, tell me what they’ve done
Speak the words I wanna hear, to make my demons run
The door is locked now, but it’s opened if you’re true
If you can understand the me, then I can understand the you
Lay beside me, under wicked skies
Black of day, dark of night, we share this pair of lies
The door cracks open, but there’s no sun shining through
Black heart scarring darker still, but there’s no sun shining through
No, there’s no sun shining through
No, there’s no sun shining
What I’ve felt, what I’ve known
Turn the pages, turn to stone
Behind the door, should I open it for you?
Yeah
What I’ve felt, what I’ve known
Sick and tired, I stand alone
Could you be there, ‘cause I’m the one that waits for you
Or are you unforgiven too?
Come lay beside me, this won’t hurt I swear
She loves me not, she loves me still, but she’ll never love again
She lay beside me, but she’ll be there when I’m gone
Black heart scarring darker still, but she’ll be there when I’m gone
Yes she’ll be there when I’m gone
Dead sure she’ll be there
What I’ve felt, what I’ve known
Turn the pages, turn to stone
Behind the door, should I open it for you?
What I’ve felt, what I’ve known
Sick and tired, I stand alone
Could you be there, cause I’m the one that waits for you
Or are you unforgiven too?
Lay beside me, tell me what I’ve done
The door is closed, so are your eyes
But now I see the sun, now I see the sun
Yes, now I see it
What I’ve felt, what I’ve known
Turn the pages, turn to stone
Behind the door, should I open it for you
What I’ve felt, what I’ve known
So sick and tired, I stand alone
Could you be there, cause I’m the one that waits
The one that waits for you
Oh, what I’ve felt, what I’ve known
Turn the pages, turn to stone
Behind the door, should I open it for you
Oh, what I’ve felt
Oh, what I’ve known
I take this key
And I bury it in you
Because you’re unforgiven too!
I woke this morning after dreaming of you, last night
and you got me burning baby rapture shaking up inside me
I was your temptress untamed in your kiss,
you were busy terrorizing my body’s every
wish I could fall back into my sultry sleep, I
I wanna hear your heart beat right up against me
I can not hide it, I can not fight it, no more
Ooh, lets fly…
And rise like my fever
c’mon over because I’m in need of
the high that you give me
when I close my eyes and fantasize you’re here with me
I know it’s crossed your mind from time to time
a strong desire since your eyes first met mine and
I was never so ready as I am right now
c’mon and take my hand let’s cross the line I’ll show you how
I cant control it, I can not hold it no more
you are the only man I, I want to adore and
I can not fight it, I can not hide it no more
I’m waiting for you, now lets fly…..
and rise like my fever
c’mon over because I’m in need of
the high that you give me
when I close my eyes and fantasize
you’re here with me
I’ve been waiting for you
to make that move
but I can’t wait anymore
come over here and kiss me
I want a taste of my dream
and rise like my fever
c’mon over because I’m in need of
the high that you give me
when I close my eyes and fantasize
you’re here with me
Edit: No puedo creer que la señorita Bonnie Bailey haya venido hasta mi blog para corregir la letra de su canción, la cual me encanta. Increíble…
¡Oh, sí! ¡Oh, sí! Mucho indagué, pero tiempo después y fruto de una búsqueda casual, ya he conseguido esta canción que tanto añoraba.
Cuando la playa se inundó de luz y sol y cuando el mar con su rubor habló de amor, cuando soñaba en el azul, fue realidad ese soñar, llegaste tú.
Flor de un verano, nuestro amor, tal vez, será, que una fatal brisa otoñal, marchitará, fin de mi sueño de ilusión, que en esta playa naufragará mi corazón.
Y seguirán igual arena y mar, la playa en soledad se quedará; el eco de tu voz se extinguirá, las huellas de los dos se borrarán.
Cuando en la playa nuevamente brille el sol, allí estaré y junto al mar recordaré, evocaré en la inmensidad de nuestro amor, que me brindó felicidad.