No te rías de aquellos que son mayores que tú; no te gustará cuando dentro de unos años formes parte de ese grupo de edad mientras otros más jóvenes que tú se rían de ti.
La mejor manera para impresionar a alguien es no tratar de impresionar y ser simplemente tú mismo.
Las pequeñas cosas son las que más nos pueden llegar a cambiar, como un simple detalle o una frase de pocas palabras.