Siempre he pensado que las relaciones interpersonales pueden ser clasificadas en función de los dominios que satisfacen, algo así como las necesidades que cubren para cada persona. Sé que puede resultar una manera muy burda de simplificar algo tan complicado como son las interacciones sociales pero reconozco que a veces me aburro. Sin embargo, para mí los momentos de aburrimiento son la excusa perfecta para echar a andar la imaginación y a veces surgen desvaríos como este.
Este diagrama de Venn debe ser interpretado como una representación gráfica sin fines didácticos y carente de validez científica, no vaya a ser que alguien vea su sensibilidad herida.