Intenta alcanzar tus sueños.
La felicidad es como mearse en los pantalones, todo el mundo puede verlo pero sólo tú puedes sentir su calidez.
Las ideas son como los culos, todo el mundo tiene uno y, aunque pensemos que el de los demás apesta, no queremos reconocer que en el fondo nos encanta el olor de nuestra propia mierda.