Hay terrenos demasiado peligrosos como para adentrarse en ellos.
Las palabras que más tardamos en decir son aquellas que terminan no siendo dichas.
Hay personas que parecen normales hasta que las conoces; nunca te olvides de ser increíble.
No le hagas caso a la pirámide alimenticia, lleva una dieta equilibrada y haz ejercicio.
Ir a la cama sin sueño puede resultar peligroso porque tienes demasiado tiempo para dejar divagar a tu mente.
Al igual que el brillo de la Luna depende de la luz que recibe del Sol, muchas personas brillan simplemente por el efecto albedo que poseen.
El miedo es una respuesta emocional a algo que se percibe como un riesgo, y es un mecanismo básico de supervivencia que ocurre en respuesta a un estímulo específico, como el dolor o un peligro. Soy de la opinión que el miedo es algo innato en todos nosotros y, de hecho, muchos seres vivos lo experimentan y está relacionado con los comportamientos específicos de escape y evitación. Hay quien lo confunde con la ansiedad, que es un estado emocional derivado del miedo, que normalmente ocurre en ausencia de un riesgo externo al individuo o es producto de la percepción de un riesgo como incontrolable o inevitable.
Tener miedo es normal, es natural, y no pasa a convertirse en un problema hasta que el individuo es incapaz de controlar y adaptar su respuesta al mismo, en otras palabras, cuando sufre un secuestro emocional.
Así que, basándonos en esto, cualquier emoción, desde las más básicas como el miedo, la alegría, la tristeza o la ira, a las más complejas como la curiosidad, ansiedad o la esperanza, guarda una dualidad innata que la convierte en negativa siempre que logre librarse de las riendas y pase a tomar el control de nosotros.
La vida está llena de peligros ocultos pero nunca debes dejar de vivirla por temor a ellos.
Puedes obligarte a actuar como lo que realmente no eres pero en el fondo sabes que estarás interpretando un papel.
No bebas en exceso, no aceptes regalos de extraños, usa protector solar, dúchate en buena compañía, abre la ventana si sientes calor, prueba comidas nuevas, evita lesionarte, abraza con fuerza, besa con pasión, acaricia suavemente… Vive con intensidad.