Desde la estepa

Desilusionado, seguí mi camino, no sabia adónde, para mí no había objetivos, ni aspiraciones, ni deberes. La vida sabía horriblemente amarga; yo sentía cómo el asco creciente desde hace tiempo alcanzaba su máxima altura, como la vida me repelía y me arrojaba fuera. Furioso, corrí a través de la ciudad gris, todo me parecía oler a tierra húmeda y a enterramiento. No; junto a mi fosa no había de estar ninguno de estos cuervos, con su traje talar y su sermoneo sentimental y de hermano en Cristo. Ah, dondequiera que mirara, dondequiera que enviase mis pensamientos, en parte alguna me aguardaba una alegría o un atractivo, en parte alguna atisbaba una seducción, todo hedía a corrupción manida, a putrefacta medioconformidad, todo era viejo, marchito, pardo, macilento, agotado. Santo Dios, ¿cómo era posible? ¿Cómo había podido yo llegar a tal extremo, yo, el joven lleno de entusiasmo, el poeta, el amigo de las musas, el infatigable viajero, el ardoroso idealista? ¿Cómo había venido esto tan lenta y solapadamente sobre mí, esta paralización, este odio contra la propia persona y contra los demás, esta cerrazón de todos los sentimientos, este maligno y profundo fastidio, este infierno miserable de la falta de corazón y de la desesperanza?

Hermann Hesse. El lobo estepario

Caprichos 2010

FondeadoHoy me he enterado de un curioso concurso que ha organizado Fnac para bloggers. El plazo termina mañana 31 así que me he tenido que dar prisa a la hora de confeccionar mi lista de caprichos particular.

  • Samsung i9000 Galaxy S Móvil libre – 569 €. Tengo ganas de cambiar de móvil y como la moda ahora son los smartphones con conexión a Internet, cámara de fotos, pantalla multi-táctil y cierre centralizado pues me he decantado por este modelo con Android antes que por un iPhone 4.
  • Tamron 18-270 MM DI II VC para Nikon – 564,90 €. No es nada nuevo, estoy detrás de este objetivo desde que lo vi anunciado en la web de Tamron, y ahora con más ganas después del accidente que sufrió mi Nikkor 18-105 que venía de serie con la D90.
  • Manfrotto 7322YC Trípode de fibra de carbono – 279 €. Esto de andar dependiendo del trípode de mi padre para la fotografía nocturna no me hace gracia, sobre todo teniendo en cuenta que para una cámara compacta funciona muy bien pero con el peso de mi cámara es muy inestable.
  • Manfrotto Rótula 808RC4 – 179 €. Por supuesto, tres palos no sirven de nada sin un sistema de sujeción con opción de movimiento en los tres ejes. La idea de una rótula de eje único no está mal, pero a la hora de realizar panorámicas requiere de mucho más control que una de ejes independientes.
  • Lexar SD-HC 16 GB Premium Tarjeta de memoria x 2 – 94 €. Ya me ha ocurrido un par de veces que salgo de casa ilusionado con mi cámara y cuando voy a sacar una foto, sorpresa, la tarjeta está en el lector del ordenador. Así que lo mejor es tener siempre una o dos tarjetas de repuesto en la mochila por si acaso.
  • Nikon MC-DC2 Control Remoto – 29,90 €. Una cosa que he aprendido, tanto por la práctica como con la lectura, es que durante las fotografías de larga exposición como las que se realizan por la noche mientras menos toques la cámara mucho mejor. Hubiese preferido uno de los de Aputure que viene con temporizador pero no están disponibles en la web de la Fnac.
  • Nikon SB 600 Flash Profesional – 289 €. La última vez que tuve que sacar fotos de noche a sujetos en movimiento noté las grandes limitaciones que tiene el flash incorporado de mi cámara. Luego he estado leyendo sobre el relleno de luz en las fotos nocturnas y creo que es hora de comprar un flash en condiciones.

Son caprichos y son caros, lo sé, pero a ver si algún Rey Mago o la probabilidad se acuerda de mí y me permite conseguir alguno.

Pensamiento del día

Las cosquillas son un buen indicador del grado de sensibilidad.

Tanto los excesos como los defectos son negativos, lo difícil es encontrar el punto de equilibrio óptimo.

Cualquier causa es perdida mientras que las expectativas se hallen fuera de los límites objetivos de la realidad.

Valores fundamentales

DSCN0089Todos tenemos ciertos valores fundamentales, ciertas reglas que marcan nuestra conducta, algo así como la moral y la ética que dictan cómo y quiénes somos. Una vez más, rebuscando entre los papeles de mi escritorio me he encontrado con una lista bastante curiosa:

Valores fundamentales

  1. No hablar de los valores fundamentales.
  2. La sencillez es la mejor manera para conseguir tu objetivo.
  3. Pienso cosas impresionantes luego lo soy.
  4. Decir siempre la verdad… Excepto cuando esos pantalones te hacen parecer una morcilla.
  5. Apuñalar a cualquiera que se atreva a acusarme de sobreactuar.
  6. Hacer cualquier cosa que sea necesaria para completar una tarea… Menos en los momentos para descansar.
  7. Esforzarse para ser cómodamente adecuado.

Como boceto no está nada mal.

Pensamiento del día

Si el destino no es de tu agrado busca uno nuevo y comienza otro viaje.

La labia es la herramienta que muchos usan como método para conseguir lo que les interesa; para algunos es la única manera que poseen para alcanzar sus objetivos.

La buena reputación es algo que no sirve sino para imponer limitaciones a la hora de hacer lo que realmente a uno realmente le apetece hacer pero que por lo visto hay que mantener dentro de unos cánones que el resto de la sociedad tiene la osadía de calificar como aceptables.

Fotografiando la noche

Man on the MoonSiempre me ha gustado la fotografía nocturna, no lo voy a negar, pero hasta hace poco no me había propuesto hacer una excursión por algunos miradores que conozco para hacer una pequeña sesión fotográfica. Llevaba días pensando en el tema y anoche por fin me decidí a salir, cámara y trípode en mano cual explorador, a cazar instantáneas. Tengo que comentar que mi experiencia en el tema tiende a cero así que, como era de esperar, después de muchos intentos infructuosos logré tomar alguna que otra foto medianamente aprovechable.

Aquí van un par de consejos cortesía de la casa después de mucho ensayo y error:

  • Imprescindible usar un trípode, no hay excusas posibles. Da igual que tengas pulso de neurocirujano, nadie tiene tanto control de sí mismo como para aguantar más de medio segundo sin moverse, aunque sea lo más mínimo. Es probable que en alguna ocasión encuentres algún lugar firme donde poder colocar tu cámara si no lo llevas encima pero no suele ser lo normal. Barandillas, piedras y otras superficies no son lo más aconsejable para la integridad física de tu material. Si tienes una cámara compacta ultraligera te pueden servir esos trípodes de juguete que se pueden doblar de cualquier forma, pero si tienes una DSLR tienes que optar por algo más profesional y consistente. La calidad se paga, así que hazte una idea que esos tres palos amarrados con una cuerda no te van a servir de mucho.
  • Configura tu cámara en una sensibilidad ISO por debajo de 200. Las fotografías nocturnas requieren de largos períodos de exposición y hay quien pueda pensar «pues aumento la sensibilidad de la película y me ahorro tiempo» pero es un error grave porque de esta manera conseguirás un granulado del tamaño de lentejas.
  • Bloquea tu diafragma a f/8, hazme caso. Hay quien pueda pensar «abro el diafragma al máximo y así consigo más iluminación en menos tiempo» pero así conseguirás que los puntos de luz aparezcan tan grandes como bolas de fuego, lo cual es especialmente molesto cuando en la imagen aparece una fuente luminosa potente como puede ser la Luna.
  • Distintas velocidades del obturador, distintos resultados. Si te apetece y tienes ganas de investigar prueba a trastear con la velocidad del obturador pero ten en cuenta que por debajo de cuatro segundos no vas a conseguir sino negrura. Ojalá las cámaras funcionasen igual que nuestros ojos, pero no es así, así que aunque vayas a fotografiar un edificio tan iluminado que te duelan los ojos con tan sólo mirarlo tu cámara es lo más parecido a un topo, así que no te asustes.
  • Usa un disparador remoto o con temporizador. No, no es un capricho, es para evitar la vibración en la cámara cuando pulsamos el botón y puede ser la diferencia entre una foto bien enfocada o un asco de luces y formas. Recuerda la larga exposición, cualquier pequeño movimiento se va a notar sí o sí, así que ni rozar la cámara o el trípode mientras está el obturador abierto.
  • Por último, y no menos importante, dispara en RAW siempre, sea de día o de noche. ¡Aprovecha la verdadera capacidad de tu cámara!

Por cierto, si vas a fotografiar algún paisaje intenta que sea un día con el ambiente especialmente libre de polución como después de haber llovido, que suele ser el mejor momento. La mierda en suspensión brilla con inusitada facilidad cuando las luces de la ciudad la iluminan, y mucho más si tenemos en cuenta el tiempo de exposición de la fotografía.

La Laguna

Ahora me toca buscar en Google más trucos para intentar seguir mejorando. Creo que debería empezar por dejar de coger prestado el trípode de mi padre y comprar uno en condiciones para mí. Ah, y un disparador de infrarrojos tampoco estaría nada mal, o ese objetivo Tamron que me tiene enamorado, o…