¿De verdad te crees tan moderna con ese flequillo recto a la altura de las cejas? ¿Te consideras a la moda por llevar esas gafas de montura de pasta? Eres una copia burda a modo de collage de modas pasadas.
- Las gafas de montura de pasta ya las lucían a mitad del siglo pasado Audrey Hepburn o Jackie Kennedy, señoras en toda la extensión posible de la palabra.
- El flequillo recto, recuerdos de los años cincuenta y sesenta también, de las chicas enloquecidas con el rock & roll de los Rolling Stones y los Beatles.
- Los pantalones vaqueros estrechos, también del siglo pasado, vestimenta típica de los «rockabillies», esos que salían en la peli de Grease.
- Las zapatillas Victoria son una copia de las originales y genuinas zapatillas Crube de toda la vida, esas que se compraban en el Número 1.
Resulta, cuanto más que curioso, que seas una copia de Velma Dinkley, la primera gafapasta de la que se tiene constancia. Quizás por el nombre no la conozcas, pero nació como personaje en 1969 de mano de la productora de Hanna-Barbera, la misma de Pedro Picapiedra y El Oso Yogi. ¡Sí, es un dibujo animado! No es nada más ni nada menos que la listilla del grupo de Scooby-Doo.
Son cosas como estas las que hacen que cada día me reafirme más en una idea que me asalta desde hace tiempo:
Las ideas creativas se han acabado, ahora lo que se hace [por norma general] es plagiar.
Y no me refiero sólo a la moda, porque también la música de hoy en día [en su mayoría] sólo se basa en samplear canciones antiguas y meterles letras nuevas, y a veces ni hasta se dignan a eso, sólo a versionar.
Las mentes creativas soy una leyenda urbana, algo que una vez existió y hoy sólo quedan tan pocas que a veces se duda acerca de su existencia. Qué triste…