Sueños publicitarios

It’s hard. They always do that; as soon as they get what they want, they disappear. They take in front of me time and time again, and i let them. Sometimes I feel so dirty, used. What happened to romantic dinners? Picnics at the beach? Holding hands in the park? A cosy night with DVDs and popcorn? They don’t see me as me. They see me as some sort of toy. Sometimes I just wanna be held at night. All they think about is fuck. And fucking is nice but not 24/7. Women are pigs.

Become a girl toy. There is a Jack & Jones store near you.

El mensaje está claro, ponte esta ropa y será el juguete sexual de las tías, no hay más. Sin embargo, el diálogo del tío me ha resultado curioso y creo al combinarlo con las imágenes y una buena edición de vídeo se consigue llegar hasta el espectador. Se hace extraño que un hombre ande diciendo todas esas cosas cuando normalmente estaríamos acostumbrados a que fuese una mujer. La situación es tan surrealista que logra su objetivo, que el individuo que esté viendo el anuncio sufra un episodio onírico durante el estado de vigilia, dicho de otra manera, comience a soñar despierto imaginándose en la situación en la que se encuentra el protagonista. Pero claro, junto a esta idea va asociada la marca como condición para alcanzar esa fantasía, y ahí es donde la empresa detrás del producto saca su parte lucrativa, es decir, dinero.

Siempre se ha dicho que los que más dinero gastan en publicidad son los que menos la necesitan. Hoy en día, gracias a Internet, las empresas se están ahorrando mucho presupuesto en publicidad porque no sé cómo estará ahora mismo la relación tiempo/dinero en la televisión, pero la red y con un par de herramientas gratuitas en lo único que tienen que gastar es en la agencia de publicidad y poco más. Es un negocio redondo, porque luego serán los propios usuarios los encargados de diseminar su campaña por todo este vasto territorio que es la red mundial, ya sea a través de blogs o redes sociales, el perfecto caldo de cultivo.

La publicidad siempre se ha aprovechado de los deseos, más o menos básicos, que todos poseemos de manera que nos transmite la idea de que consumiendo productos lograremos satisfacer nuestras ansias y, al fin y al cabo, ser felices aunque cada uno a su manera. Esa es la mentalidad de las sociedades del consumismo salvaje y el materialismo enfermizo. Si se lograse hacer lo mismo con la cultura estoy seguro que otro gallo cantaría.

Esa graciosa canción

«Yakety Sax» es una pieza musical escrita por James Q. «Spider» Rich, y publicada como single en un vinilo de 45 rpm de Boots Randolph en 1963.

La canción no debe ser confundida con la de Leiber y Stroller titulada «Yakety Yak«, grabada en 1958 por The Coasters. Las afinaciones son similares, y ambos tienen el sonido de «Yakety Sax», pero tienen distintas melodías. Randolph había grabado una versión anterior de «Yakety Sax» ese año para la compañía RCA Victor, pero no fue hasta la siguiente grabación para Monument Records que se convirtió en un estándar.

El guitarrista Chet Atkins grabó una versión de esta canción en 1965 titulada «Yakety Axe«. Esta versión usaba un tempo similar y mostraba su estilo de punteo de guitarra de country en lugar de un saxofón. El cambio de título hace referencia al término coloquial «axe» usado para la guitarra eléctrica.

«Yakety Sax» ha sido usado en televisión y películas para acompañar situaciones de humor, sobre todo en persecuciones cómicas, siendo su máximo exponente el programa de humor The Benny Hill Show, donde acompañaba escenas sin diálogo, en velocidad rápida y, a menudo, de persecuciones. Este uso de la canción, y del propio formato de este programa, ha sido parodiado en otros muchos programas de televisión y películas.

Generación 80

No bebo Coca-Cola, me sienta fatal para el estómago, pero he de decir que estos anuncios tienen un toque nostálgico que los hace muy buenos:

De gafapastas

velma¿De verdad te crees tan moderna con ese flequillo recto a la altura de las cejas? ¿Te consideras a la moda por llevar esas gafas de montura de pasta? Eres una copia burda a modo de collage de modas pasadas.

  • Las gafas de montura de pasta ya las lucían a mitad del siglo pasado Audrey Hepburn o Jackie Kennedy, señoras en toda la extensión posible de la palabra.
  • El flequillo recto, recuerdos de los años cincuenta y sesenta también, de las chicas enloquecidas con el rock & roll de los Rolling Stones y los Beatles.
  • Los pantalones vaqueros estrechos, también del siglo pasado, vestimenta típica de los «rockabillies», esos que salían en la peli de Grease.
  • Las zapatillas Victoria son una copia de las originales y genuinas zapatillas Crube de toda la vida, esas que se compraban en el Número 1.

Resulta, cuanto más que curioso, que seas una copia de Velma Dinkley, la primera gafapasta de la que se tiene constancia. Quizás por el nombre no la conozcas, pero nació como personaje en 1969 de mano de la productora de Hanna-Barbera, la misma de Pedro Picapiedra y El Oso Yogi. ¡Sí, es un dibujo animado! No es nada más ni nada menos que la listilla del grupo de Scooby-Doo.

scooby-doo

Son cosas como estas las que hacen que cada día me reafirme más en una idea que me asalta desde hace tiempo:

Las ideas creativas se han acabado, ahora lo que se hace [por norma general] es plagiar.

Y no me refiero sólo a la moda, porque también la música de hoy en día [en su mayoría] sólo se basa en samplear canciones antiguas y meterles letras nuevas, y a veces ni hasta se dignan a eso, sólo a versionar.

Las mentes creativas soy una leyenda urbana, algo que una vez existió y hoy sólo quedan tan pocas que a veces se duda acerca de su existencia. Qué triste…

Recuerdos añejos

No sé por qué, pero hoy me dio por cantar esta canción en el trabajo a dúo con mi compi.

Banda Blanca – Sopa de caracol

Una cosa llevó a la otra, y como en youtube hay una opción para ver vídeos relacionados… Estoy más emocionado que una vieja plañidera viendo la boda del Príncipe Felipe. Recuerdos de Carnavales hasta las tantas de la mañana y locas verbenas de juventud. Por supuesto estoy hablando de la mejor orquesta que Canarias llegó a tener jamás: la Orquesta Caracas.

La Orquesta Canacas – Mete saca

La Orquesta Caracas – El baile del perrito

Son sólo dos canciones de las muchas que bailé al son de esta orquesta, a modo de aperitivo para los nostálgicos como yo, que echamos de menos las fiestas en las que no había que ir con miedo sino que se salía para pasárselo lo mejor posible.