Pensamiento del día

Hay quien cree ser independiente o autosuficiente y esto es un gran error, además de un alarde de hipocresía. Tanto uno como el otro son términos utópicos porque el simple hecho de vivir nos hace depender de cosas tan simples como el oxígeno para nuestros pulmones, el agua potable para calmar nuestra sed y los alimentos con los que poder proveer de nutrientes a nuestro cuerpo.

La soledad posee la dualidad inherente a todas las cosas en esta vida, tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. El día que aprendas a convivir con la soledad estarás realmente preparado para tener una relación. Además, también estarás preparado para regresar a ella cuando sea necesario.

No me arrepiento de mis acciones; arrepentirse conlleva un sentimiento de dolor interno, un deseo de cambiar lo que se ha hecho o lo que se ha dejado de hacer. Echando una mirada retrospectiva, reconozco que he cometido fallos pero ya son historia y son inamovibles. Acepto las consecuencias de mi propia manera de actuar y de esta manera no me pesan en el corazón.  Además, sé que si quiero cambiar algo de nada me sirve mirar al pasado que no se puede alterar porque tengo que llevar a cabo mi tarea en el presente y mi objetivo se encuentra en el futuro.

Canarias Jazz & más Heineken 2010 (y II)

Anoche tuvo lugar en la Plaza de Europa del municipio tinerfeño del Puerto de la Cruz otra cita con el XIX Festival Internacional Canarias Jazz & más Heineken. Abrió el espectáculo Yul Ballesteros Quartet dirigido por este guitarrista oriundo de la vecina isla de Gran Canaria. Estaba acompañado por el gran saxofonista Kike Perdomo que hizo las veces de acompañante y magnífico solista. Una nota curiosa es que tanto el batería como el contrabajista eran caras conocidas, se trataba de Ari Hoenig y Orlando Le Fleming respectivamente, artistas que hicieron gala de su capacidad interpretativa el día anterior en el Auditorio de Tenerife.

En esta ocasión el protagonismo recaía principalmente en el guitarrista Yul Ballesteros que, dentro del género del smooth jazz, deleitó a los presentes con una gran armonía a la guitarra tanto en los acompañamientos como en los solos. Lejos de interpretaciones abruptas, todos los músicos hicieron gala de una suavidad y una elegancia excelentes. Sin embargo, el público no quiso insistir demasiado en reclamar un bis, una nota negativa a la impecable actuación.

Después hubo un descanso de unos quince minutos en los que yo aproveché para tomarme una caña bien fresca mientras los miembros del staff retiraban los instrumentos para dejar espacio a la siguiente actuación a cargo de Angélique Kidjo, que venía auspiciada por la Casa África. He de confesar que no conocía a esta artista así que cuando comenzó a cantar enseguida supe que lo que estaba por venir no se podía clasificar dentro del jazz. Cuando empezaron a brotar ritmos que invitaban a estar de pie y bailar comprendí que estando sentado en mi silla no iba a disfrutar lo mismo, pero incluso así continué en mi lugar. Pude observar cómo algunas personas del público que estaban de pie se animaban a bailar y fue entonces cuando irrumpieron en la parte delantera del aforo. La artista hizo gala de una gran capacidad vocal así de unas grandes dotes para el baile, lo cual no hacía sino animar aún más a los asistentes.

Todo el público que hasta ese momento se hallaba retenido en sus asientos se puso entonces de pie, Angélique se bajó del escenario y se paseó por toda la plaza mientras cantaba e invitaba a quien encontraba a su paso a cantar con ella. A partir de ahí el espectáculo se volvió en un completo festival de bailes y algarabía hasta el punto de invitar al público a que subiese para bailar y cantar con ella. Obviamente yo no iba a ser menos y me lancé de cabeza a disfrutar en medio de la multitud de un espectáculo atípico en el que al lado de la cantante y el resto de sus músicos bailamos y coreamos sus canciones.

Como curiosidad, ayer era el cumpleaños de la cantante así que todos los allí presentes le cantamos el «happy birthday». Luego el percusionista trajo consigo uno de sus tambores para que quien quisiera bailara a su ritmo. Cuando terminó la actuación nos invitaron a abandonar el escenario pero ahí no podía terminar, así que de nuevo salieron los artistas para hacer el bis y volver a poner a saltar, bailar y gritar a toda la Plaza de Europa.

Pensamiento del día

Love lasts til it ends. I could love you forever this night.

Todos poseemos en nuestro cuerpo algunas zonas más sensibles que otras. Por ejemplo ¿alguna vez te han dado un beso que te ha producido escalofríos y te ha puesto la piel de gallina toda la extensión de tu hemicuerpo?

En una relación a veces surgen frases como «es que siempre hacemos lo mismo» que a veces nos resultan un tanto extrañas porque, quizás, para nosotros no existe problema alguno en «hacer lo mismo» una y otra vez. La felicidad no se basa en hacer cosas nuevas y diferentes, la cuestión está en saber disfrutar de las cosas que ya haces.

Muchas personas están obsesionadas con la belleza, intentar ser más o menos atractivos. De todos es conocido que la buena apariencia confiere seguridad en sí misma a la persona que la posea, pero no es la única variable que afecta a nuestra autoestima. Recuerda que nunca eres tan feo como tú crees ni tan guapo como te dicen que eres, así que no te flageles ni te dejes manipular.

Canarias Jazz & más Heineken 2010

El 9 de julio arrancó el Festival Internacional Canarias Jazz & más Heineken en su XIX edición. Me quedó mucha pena de no haber asistido al concierto que dio CéU en la Plaza del Auditorio de Tenerife en primer lugar porque no tenía constancia del mismo y en segundo lugar porque de todas formas al día siguiente tenía que madrugar.

A la actuación que sí pude asistir fue la de Dee Dee Bridgewater el lunes 12 que prometía interpretar los temas más emblemáticos de la gran diva Billie Hollyday. De los temas que interpretó esta cantante de Memphis no conocía ni uno solamente aunque, eso sí, hizo gala de su gran capacidad interpretativa y regalando algunas improvisaciones de scat. En el escenario fue todo un espectáculo, bailando al son de la música y con mucha complicidad con los músicos de su banda.

Edsel Gomez estaba al piano, con la curiosidad de poseer antepasados canarios como él mismo pudo comentar; Lewis Hash deslumbró con algunos solos de batería impresionantes; Craig Handy acompañó de manera muy elegante a cargo del saxo y la flauta travesera, además de regalar unos cuantos solos con una armonía fantástica. Kenny Davis, el bajista, tuvo la oportunidad de tocar a dúo con la cantante, uno de los momentos junto con el solo del batería que más me gustaron de toda la velada.

Ayer, martes 13, el Ari Hoenig Trio tuvo su cita en la sala de cámara del Auditorio de Tenerife, dirigido por el batería Ari Hoenig que sorprendió al público con su increíble interpretación a la batería. Este hombre apareció con una camiseta roja con la bandera española impresa donde se podía leer «yo soy español» escrito sobre las barras horizontales. Los cambios de ritmo y los solos vertiginosos de este virtuoso de la percusión me dejaron estupefacto pero lo que sin duda alguna fue lo más increíble es la capacidad que tiene este músico para distorsionar el sonido de su batería con sus manos, codos o baquetas para conseguir extraer distintas notas.

El trío se completa con Giled Hekselman a la guitarra eléctrica, que supo extraer de las cuerdas de su instrumento desde acordes suaves hasta notas punzantes en sus solos. Al bajo estaba Orlando Le Fleming que, si mal no recuerdo, no tuvo ocasión de realizar ningún solo y se limitó a acompañar a los otros dos músicos. La nota negativa ha sido una persona que se encontraba un par de filas detrás de mí que no paró de interrumpir con gritos en inglés a los múisicos que, lejos de animar el ambiente, consiguió que gran parte del público se sintiese incómoda y molesta.

Después de esta actuación hubo un descanso de unos quince minutos y seguidamente hizo su aparición el Miguel Zenón Quartet, dirigido por el saxofonista puertorriqueño Miguel Zenón y con Luis Perdomo al piano, Hans Glawishing al bajo y Henry Cole a la batería. El saxofonista tan sólo se dirigió al público cuando estaba a punto de finalizar su actuación nada más, lo cual no sé si será un aspecto típico en él o es que deliberadamente y por alguna razón lo quiso hacer así. Todos los músicos excepto el bajista tuvieron ocasión de realizar solos que, para mi gusto, fueron demasiado extensos, lo cual no resta mérito a su interpretación pero sí que podían resultar un poco difíciles para aquellas personas poco familiarizadas con el jazz.

De hecho, durante la misma hubo algunas personas del público que se levantaron de sus asientos y se marcharon. Es más, al finalizar una gran parte de los asistentes abandonó la sala antes del bis del cuarteto, quedando el aforo bastante vacío, una pena porque interpretó una versión del bolero «Cómo fue», original del cubano Ernesto “Tito” Duarte Hernández, que fue sobresaliente. Personalmente, esta ha sido la actuación que menos me ha gustado de las tres que he visto hasta el día de hoy. Por cierto, las dos últimas fotos son del concierto en el Paraninfo de la ULPGC, cuando cuelguen las del Auditorio las cambiaré.

Pensamiento del día

A veces visito el pequeño país de los gusanos tan sólo para recordar en qué no me debo convertir.

Siempre he tenido sueños pero son pocos los que no he intentado alcanzar. Ahora tengo la responsabilidad de hacer algo, tengo una llave en mi mano y lo único que necesito es encontrar la cerradura.

Cada noche, cuando me acuesto en mi cama, brota de mi ojo izquierdo una lágrima, sólo una. Siempre igual, la misma sensación en la comisura de mi ojo, una ligera humedad caliente que recorre mi mejilla hasta morir en la almohada. No, no es tristeza, son simplemente gotas de indiferencia.

SHANA – Uyangichomela (Ralf GUM Classic mix)

Uyangichomela es una canción del grupo sudafricano SHANA. Simply Hot And Naturally African (SHANA) son tres tíos que se conocieron mientras estudiaban música en Durban y formaron esta banda en 1997. Una pasión compartida por la música los llevó a un entendimiento instantáneo, a pesar de poseer antecedentes muy distintos. La combinación ha demostrado ser excelente. Cada músico proporciona su talento especial al grupo, lo que le confiere a su música «sabores» tanto profundos como sutiles. Las distintas experiencias que usan en su ecuación crean armonías y complejas fusiones sonoras sorprendentemente bien desarrolladas. Pero lo más importante, la música de SHANA es capaz de irrumpir en todos los grupos independientemente de la edad, las creencias o la raza. Además de promocionar e interpretar sus propias creaciones, SHANA escribe sus canciones y realiza su propia producción.