Otros brazos te estrecharán celosamente
Otros labios probarán tu boca
Tu piel conocerá otras caricias
Otro cuerpo te hará conocer placer
Y lo que más me jode es que no seré yo, serán otros los que mancillen el velo que quedó sobre ti y te hacía tan mía. Pensar en esto me destroza los ánimos, pero supongo que tendré que hacer como que lo acepto, aunque sea la mayor mentira que haya interpretado jamás.