Después de acabar el sábado en el rally fuimos a Yelmo de Meridiano a ver la película del Exorcista: el Comienzo. La película estaba interesante, con sustillos y una trama interesante. Sin embargo, entramos a la 1:00 y salimos de la sala a las 2:00 por el cambio horario, es decir, hemos perdido una hora del día, un día con 23 horas. Increíble pero cierto.
Aparte de esto, en GITS SAC uno de los tachikomas proponía una paradoja a una robot y veíamos cómo se saturaba completamente. «Si siempre digo mentiras, si dijese una mentira estaría diciendo la verdad, ¿no?»