Pensamiento del día

El alcohol no es una solución a los problemas, más bien es la excusa para no pensar en ellos.

El valor de un logro es directamente proporcional a la dificultad para conseguirlo.

Si perdonas pero no olvidas siempre tendrás la impresión que el pasado reaparece.

Pensamiento del día

Cuando la situación te agobie, descansa, tómate algo y piensa en nuevas opciones.

No puedes pretender que alguien confíe en ti si a cada palabra y acto haces dudar de tu veracidad.

No puedes andar quejándote todo el día sobre lo que te molesta si no haces nada al respecto para ponerle solución.

Pensamiento del día

Sentirse perdido es completamente normal; encontrar el camino es totalmente opcional.

Quejarse de algo y no poner solución es como quemarse y no retirar la mano del fuego.

«Por el poder que me ha sido otorgado yo te nombro Paladín de las Causas Perdidas»; y desde aquel día así voy.

Pensamiento del día

Los únicos sueños de los que desearíamos despertar son los malos.

Llorar no es la solución sino un alivio momentáneo.

Es muy importante comprender la diferencia que existe entre oír y escuchar; hay personas con las que debes tener claro qué opción de las dos debes utilizar.

Campanas de Gauss

DSCN0164A menudo encuentro excusas para ponerme a divagar y no es que las busque de manera intencionada, simplemente aparecen ante mí y, al igual que un pequeño resorte, hacen que mi maquinaria mental comience a funcionar.

La belleza exterior no compensa las carencias interiores, ni mucho menos al contrario. En realidad, ahora que lo pienso, ella tampoco es nada del otro mundo pero claro, en aquel entonces yo estaba enamorado y ahora no. El amor hace que veamos con otros ojos a nuestra pareja e, incluso, la tomemos como el último reducto de belleza en el mundo. Esto no tiene por qué ser necesariamente negativo, es algo que asegura la continuidad de la relación y la fidelización de los implicados.

El problema llega cuando te das cuenta, tal vez demasiado tarde, de todo esto: la relación comienza a degradarse hasta tal punto que la disolución es inevitable. Al menos te queda el consuelo de haber aprendido algo de todo ello y que será de gran ayuda en el futuro.

Todos opinamos cuando algo es bello, atractivo o simplemente nos gusta. Dicen que la belleza está en los ojos de quien mira, y se antoja como una idea realmente romántica, pero la realidad es que la belleza está en la mente que la evalúa. Nos pasamos toda la vida comparando variables extrañas con variables ya conocidas en nuestro cerebro y así, de esta manera, podemos saber qué es correcto, si esa persona resulta conocida, lo que nos gusta o cómo realizar correctamente una tarea. Sin embargo, a pesar de parecer algo sencillo en realidad estos juicios de valor se basan en procesos más complejos. Por ejemplo, podemos saber si una persona nos gusta o no, pero esto engloba multitud de matices como podría ser su configuración anatómica, el sentido del humor, la manera de hablar o el olor corporal.

En realidad, la clave de todo radica en una sencilla media aritmética salvo que, en este caso, el resultado no es numérico porque el valor de cada variable no es objetivamente cuantificable. Tomando todas las variables que uno considera como importantes, si el resultado se encuentra dentro del dominio de nuestra campana de Gauss particular que para nosotros representa todo aquello que nos gusta, entonces uno puede decir que está satisfecho. Y aunque en un principio parezca incongruente teniendo en cuenta la particular naturaleza inconformista que algunos poseemos, cuando nos embarga esa extraña sensación de plenitud es cuando realmente nos convencemos de que esa es la persona adecuada.

Qué simple y complicado es todo y nada a la vez.

Pensamiento del día

La ironía puede resultar muy peligrosa.

Pasamos toda nuestra vida comparando variables, por eso el sistema de referencia utilizado es muy importante.

Puede resultar fácil encontrar una solución a un determinado problema, lo complicado es ponerla en práctica para solucionarlo.