Debí llorar

Canción original del dúo de compositores cubanos Giraldo Piloto y Alberto Vera, versionada por Silvia Pérez Cruz y Javier Colina Trio.

Toma cinco

«Take Five«es una pieza de jazz escrita por Paul Desmond e interpretada por The Dave Brubeck Quartet en su álbum de 1959 Time Out y se ha convertido en una de las canciones más conocidas del grupo, famosa por su particular y distintiva melodía del saxofón y el uso del poco común ritmo quítuple de 5/4, del que proviene su nombre. Aunque «Take Five» no era la primera composición de jazz en usar esta métrica, fue una de las primeras en conseguir una gran importancia entre el público general de los Estados Unidos, llegando a alcanzar el quinto puesto en la lista de singles adultos contemporáneos de Billboard.

«Take Five» fue grabada e interpretada en vivo en múltiples ocasiones por The Dave Brubeck Quartet durante toda su carrera. Además, han existido varias versiones de la canción, algunas con letra, como la grabación de 1961 escrita por el propio Dave Brubeck y su mujer Iola, cantada por la artista Carmen McRae.

Entre estas versiones cabe destacar la de Al Jarreau con un increíble scat que grabó en Alemania en 1976.

«Take Five» ha sido incluida en la banda sonora de multitud de películas y series de televisión. A su muerte en 1977, Desmond donó los derechos de autor para sus interpretaciones y composiciones, incluyendo «Take Five», a la Cruz Roja americana, que desde entonces recibe al año unos 100000 dólares en concepto de derechos.

Sonny Rollins – St. Thomas

Theodore Walter «Sonny» Rollins (nacido el 7 de septiembre de 1930 en la ciudad de Nueva York) es un saxofonista de jazz americano reconocido como uno de los más importantes e influyentes músicos de jazz de la era post-bebob. La larga y prolífica carrera de Rollins comenzó a la edad de 11 años y comenzó a tocar con la leyenda del piano Thelonious Monk antes de cumplir los 20 años. Un gran número de sus composiciones, ente las que se incluyen «St. Thomas», «Oleo», «Doxy», y «Airegin», se han convertido en estándares del jazz.

«St. Thomas» es probablemente la pieza más reconocible en su repertorio de la que es normalmente citado como su compositor. Sin embargo, en realidad está basada en una canción infantil típica de las Islas Vírgenes, la cual solía cantar la madre de Rollins cuando él era un niño. Debido a ello posee un ritmo caribeño.

«St. Thomas»se hizo popular cuando fue publicada en el álbum de Rollins de 1965, Saxophone Colossus, aunque había sido grabada previamente por Randy Weston en 1955 bajo el título de «Fire Down There», en su álbum Get Happy. La melodía está considerada como uno de los estándares del jazz y ha sido grabada por multitud de artistas.

En este vídeo aparece el saxo de Sonny Rollins con una compañía excepcional: el pianista Kenny Drew, un jovencísimo Niels-Henning Ørsted Pedersen al bajo y el batería Albert «Tootie» Heath.

Rahsaan Roland Kirk

Una vez más, escuchando el podcast del programa de Radio 3 Sonideros he dado con un artista desconocido para mí hasta ahora. Rahsaan Roland Kirk (1935-1977) es un músico ciego conocido por ser un multi-instumentalista del jazz que tocaba y coleccionaba un gran número de instrumentos, principalmente saxofones, clarinetes y flautas, además de otros muchos. Sus principales eran el saxo tenor y otras dos variantes extrañas: el stritch (un saxo alto alargado sin el típico final curvado) y un manzello (un saxo saxello soprano modificado con un final más grande y más curvado). Kirk modificó esos instrumentos él mismo para acomodar su técnica de interpretación simultánea.

Normalmente aparecía en el escenario con los tres instrumentos colgando de su cuello, así como una variedad de otros instrumentos en los que se incluían las flautas y los silbatos, y normalmente tenía un gong a mano. Kirk también tocaba el clarinete, la armónica, el cuerno inglés y era un trompetista muy competente. A menudo usaba aplicaciones únicas, como usar una boquilla de un saxofón en una trompeta o el uso de la flauta nasal. Además también usaba objetos no musicales, como despertadores, sirenas o una sección de mangueras de jardín comunes (a las que se refería como «the black mystery pipes»).

Había gente que pensaba que la apariencia bizarra de Kirk en el escenario y la interpretación simultánea eran pantomima, especialmente viniendo de un hombre ciego, pero esas opiniones se desvanecían cuando el músico comenzaba a tocar. Usaba sus múltiples instrumentos de viento para tocar verdaderos acordes, funcionando como una auténtica sección de saxos. Kirk insistía que simplemente estaba intentando imitar los sonidos que escuchaba en su cabeza.

Además, es el principal exponente de la respiración circular, una técnica utilizada en la ejecución de instrumentos de viento y sirve para evitar tener que interrumpir el sonido al respirar. Esto se logra almacenando aire en la boca y empujarlo con las mejillas mientras se inhala aire por la nariz, para luego continuar exhalando aire desde los pulmones. Usando esta técnica no sólo era capaz de mantener una nota durante un extenso período de tiempo sino que también podía tocar progresiones de longitud virtualmente ilimitada y a gran velocidad.

Aquí va un vídeo de demostración.

Mario Biondi – This Is What You Are

Hoy escuché esta canción de Mario Biondi, interpretada junto al magnífico High Five Quintet, mientras iba en el coche; es una canción que siempre me ha gustado. Aparece en su disco Handful of Soul publicado en el 2006, altamente recomendado.

Canarias Jazz & más Heineken 2010 (y IV)

Ayer fue la clausura del XIX Festival Internacional Canarias Jazz & más Heineken con la esperada actuación del bajista Marcus Miller. Hay que aclarar que la sala sinfónica del Auditorio de Tenerife estaba prácticamente llena, creo que nunca la había visto así. Estuve hablando un buen rato con una pareja que conocí el miércoles en el Puerto de la Cruz durante el descanso antes de la actuación de Angélique Kidjo y me pudieron informar acerca del concierto del viernes del que no pude disfrutar porque me había surgido finalmente otro plan.

Sobre Christian Scott Quintet tuvieron palabras de elogio y comentaron como anécdota que en un par de ocasiones el trompetista había tenido «sopladas» en vacío. Lo que les pareció un tanto extraño fue que el artista en toda su actuación sólo habló al final para despedirse y ni tan siquiera en el bis, lo cual me recordó a la misma actitud que tuvo Miguel Zenón. En cuanto a Gerald Toto, tal y como yo esperaba, no tenía nada que ver con el estilo jazz sino que era otro concierto auspiciado por la Casa África. Por lo visto no se quedaron muy contentos con él, al contrario que sucediera con la actuación del miércoles.

La actuación estuvo plagada de explosiones de aplausos ante los solos de los músicos. Marcus Miller iba cambiando de bajo eléctrico, uno de ellos «fretless», y regalaba «slaps» y «pops» por doquier, todo combinado con algunos pedales de sintetizadores. En un momento de la actuación cogió un instrumento que me tenía intrigado desde el comienzo, era una especie de saxofón pero mucho más largo. Sean Jones usaba la trompeta con y sin sordina a discreción, con interpretaciones muy floridas junto a Alex Han, de tan sólo 22 años, al saxo. Estos dos músicos hicieron las delicias del público mientras Louis Cato dirigía la batería y Federico Peña estaba a cargo de los teclados.

Definitivamente me alegro de haber asistido a este concierto, tanto por la actuación en sí como por todo lo sucedido durante el prólogo y el epílogo.