Pensamiento del día

mario

A veces uno se cansa de hacer siempre lo mismo.

Cuando cesa el ímpetu de la novedad es cuando realmente se pone a prueba la consistencia del interés.

El tiempo que ha transcurrido desde una fecha determinada no es tan importante cuando el hecho que ocurrió no guarda demasiada trascendencia.

Feliz Sin Valentín (y II)

Lo he estado pensando mejor y, aún a pesar de posiblemente caer en la contradicción, creo que he dado con el regalo perfecto para el día de San Valentín: una patata, lo que pasa es que como soy canario por estas tierras llamamos a esos tubérculos «papa«. Tal vez haya quien piense que se trata de una broma, pero a continuación daré mis argumentos para tal afirmación.

Hay quien regala flores en esta fecha, rosas probablemente. Las rosas existen para ser bonitas pero no son muy útiles más allá de su belleza, simplemente están por ahí en un jarrón y, aunque las pongas en agua, probablemente se marchiten y mueran en un corto espacio de tiempo. Por eso, como símbolo del amor no cumple muy bien su cometido porque es como decir «mi amor por ti es transitorio y basado únicamente en tu apariencia».

Sin embargo, una papa no es que sea especialmente bonita pero es muy útil porque te sirve para cocinarla de muchas formas distintas y sabes que si la comes te alimentará. Además, por si fuera poco, una papa aguanta muchísimo más tiempo que las rosas sin estropearse. De hecho, si la dejas olvidada en el saco en lugar de pudrirse comienzan a salir raíces de ella. Ya sólo por eso la convierte en un buen símbolo, pero hay más: incluso la puedes utilizar para fabricar una pila con ella. Por eso, simboliza mucho mejor los ideales de una relación y del amor, dejando bien claro que lo más importante no es el aspecto sino la persona en su conjunto porque es como decir «existen muchas maneras en las que puedo demostrar mi amor por ti y no me importa si cambia tu exterior porque te seguiré queriendo».

No obstante, parece ser que en el día de San Valentín la gente necesita ver que la otra persona está alegremente dispuesta a prenderle fuego a su cartera y gastarse el dinero en algún regalo bonito pero inservible.

Hay personas que son como las rosas, poseen belleza exterior pero necesitan muchos cuidados y esperan admiración por mantenerse florecidas. Sin embargo, no importa lo que hagas porque tarde o temprano la belleza desaparece y te encontrarás con algo marchito en lo que has gastado demasiado dinero.

Otras personas, sin embargo, se parecen a las papas porque puede que posean belleza exterior pero su atractivo se basa precisamente en que son prácticas, son útiles, lógicas y, a pesar de todos los problemas, pueden germinar echando raíces con las que podrán crecer.

Ya sabes, cuando te acerques al mercado decide bien qué vas a comprar.

Feliz Sin Valentín

Nunca le he dado una importancia especial a San Valentín precisamente porque siempre he pensado que el amor es algo que debe demostrarse durante en el día a día y no en una fecha marcada en el calendario, con actos sinceros y movidos por los sentimientos y no acometiendo con dádivas en una especie de chantaje. Las veces en las que ha coincidido que estoy en una relación un catorce de febrero siempre aviso con suficiente antelación que no pienso regalar absolutamente nada por tal motivo consumista.

Por que sí, porque me niego a caer en la repetición borreguil de una conducta que no me parece correcta bajo mi subjetivo punto de vista. Porque el regalo más sincero que puedes hacer a otra persona eres tú mismo, tus sentimientos y tus pensamientos.

Siempre he pensado que un regalo materialista en este supuesto día de los enamorados viene a ser como una aceptación de la ineptitud propia o ajena.

«Aquí tienes este regalo para demostrarte con banal materialismo los sentimientos que tengo hacia ti y que no has podido comprobar otras muchas veces durante el resto del tiempo que llevamos juntos, probablemente porque no los sé expresar de manera correcta o porque tu manera de interpretarlos no es similar a la mía».

Patético.

Estar enamorado no siempre es sinónimo de felicidad porque para que esto sea así el amor ha de ser correspondido, debe tratarse de un intercambio bidireccional y recíproco, porque de otra manera no es sino otro mal que tortura el alma de quien lo padece. La soledad, por otra parte, es cruda y no atiende a condicionantes de terceras personas pues es la compañía de cada uno y depende de uno mismo la tarea de saber sobrellevarla de la mejor manera posible. No es lo mismo estar solo que sentirse solo y puedo asegurar que nadie lo está.

Es por eso que voy a hacer una concesión a esta fecha para no ser tachado de misántropo empedernido. Mi felicitación para los enamorados correspondidos, sentido pésame para los que no disfrutan de la reciprocidad merecida y un saludo afectuoso para todas aquellas personas que saben llevar su soledad con dignidad.

Precisamente hoy por la mañana y por causalidad de la aleatorización de mi biblioteca musical, a aparecido en mi foobar2000 esta canción de Bah Samba con la voz de Isabel Fructuoso titulada Calma. Te recomiendo que escuches la letra.

Feliz Sin Valentín.

En estas fechas tan señaladas

Mesa de Navidad [II]Estas fechas en las que estamos son muy señaladas, de hecho no hace falta sino mirar al calendario para ver que tanto el 25 de diciembre como el 1 de enero están señalados en rojo para dejar constancia que son días festivos, que no quiere decir que sean de fiesta, alegría y jolgorio, sino simplemente que no son laborables. Quizás sea por todos los acontecimientos de mi pasado, quizá sea por mis circunstancias familiares presentes o por mis fantasmas de las Navidades futuras, pero esta época del año me resulta un poco más nostálgica y melancólica que de costumbre.

El tema del consumismo está muy manido y no hace falta entrar en profundidad a analizar el modelo de negocio creado por las marcas para hacernos creer que lo más caro es lo mejor. Son bienes materiales al fin y al cabo, y todo lo material no genera sino una felicidad condicionada a su posesión que, por otra parte y por extensión, es el germen incongruente del temor por perderlo. Prefiero no seguir hablando del tema, podría acabar convirtiendo este post de buenas intenciones en una nueva guerra dialéctica contra un enemigo invisible.

No obstante, y a pesar de la resistencia natural que se consigue desarrollar, uno acaba por contagiarse de esta extraña sensación, como si de algún tipo de virus se tratase, o como si por arte de ósmosis atravesase mi barrera semipermeable particular. Mi pensamiento para este día es el siguiente: los buenos deseos no se deben quedar relegados a dos semanas en diciembre, así que muchas felicidades para los próximos 364 días. Y recuerda, vive con intensidad.

Imprimir una presentación PowerPoint

PowerPoint 2007 iconLa primera vez que quise imprimir una presentación de PowerPoint 2007 me encontré con el dichoso problema del encabezado y pie de página. Resulta que siempre me salía la fecha en la esquina superior derecha al imprimir el documento y no había manera de quitarla de en medio. Por más que investigaba, no había manera de encontrarle solución al asunto, hasta que llegó por casualidad:

  1. En la pestaña «Insertar», pulsa sobre «Encabezado y pie de página». En la pestaña «Notas y documentos para distribuir» desmarca la casilla «Fecha».
  2. En la pestaña «Vista», pulsa sobre «Patrón de documentos». Desmarca la casilla «Fecha».

Y listo, ya puedes imprimir sin la dichosa fecha en la esquina superior derecha.