Pensamiento del día

darkness

Hay personas que son como los fosfenos, luces que aparecen en nuestro campo visual pero que no son más que espejismos.

La frase tonta del día ha sido «¿pero entonces no confías en su palabra?». Si es que encontrar a alguien digno de confianza es más difícil que ver un mirlo blanco. Y lo peor de todo, cuando crees confiar en alguien, cambia de mala manera y resulta ser alguien que no conoces. De los palos se aprende, o eso dicen, pero prefiero aprender sin recibir golpes.

Es increíble cómo las personas se devalúan, cómo con sus acciones provocan desilusiones. Y eso que yo, como Pigmalión, tengo esperanzas puestas en ellas, pero son estas personas las que se empeñan en provocar desengaños. Las esperanzas son como las amarras que atan el barco al muelle en tiempo de tormenta, cuando se cortan demasiadas la nave queda a la deriva para no volver jamás a puerto. Lo peor es cuando la propia tripulación es la que corta las cuerdas; ahí sólo me queda despedirme con la mano y seguir esperando en el muelle a que otro barco atraque.

Conversaciones

conversación

-¿Para qué bebes si vas a follar? El tiempo que pierdes bebiendo puedes estar trincando.
-Se supone que quedamos para «hablar».
-¡Entre polvo y polvo se habla!

-Yo ya hablo de sentimientos, el roce hace el cariño, eso no puedes evitarlo.
-Si sabes que vas a estar jodido… toma una decisión. Cambiar tú no va a poder ser y que ella cambie tampoco, porque luego se van a estar guardando un rencor ahí «porque yo cambié por ti» y tal y cual. Ya sabes, lo típico.
-Sí, típico.
-Pues tío, decide. ¿Vale la pena estar jodido, pensando rollos chungos?
-Eso nunca vale le pena, ¿pero quién lo evita?
-Si una persona te hace sufrir… Tío, yo tomé la decisión, sólo que luego la cagué de mala manera por no cortar la relación completamente, pero la tuve que tomar. A veces pienso que no debería haberlo hecho, porque ahora estoy sufriendo más que antes cuando estaba con ella, pero sé que me estoy engañando a mí mismo.
-Bueno, nada de trabarse que es Nochebuena… ¿Nochebuena? Awita… ¡Nochevieja!